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NAIROBI, Kenia – Extremistas islámicos, el 15 de marzo, hirieron seriamente a un pastor y a su hijo de 14 años, cuando éstos se preparaban para una noche de vigilia en su iglesia, al este de Uganda, según las fuentes.
El Pastor John Balidawa, de 35, y su hijo fueron hospitalizados después que una turba de extremistas Islámicos los atacaran después de las 8 p.m. y destruyeron su iglesia en la aldea Kigulu, del distrito Mayuge.
Balidawa y su hijo, Gilbert Sanja, se preparaban para la noche de vigilia en el Centro Cristiano Ebenezer cuando escucharon golpes de piedra en el techo del lugar. Entonces seis musulmanes extremistas entraron, con el Sheikh Shafi Mukama ordenando al padre e hijo que se fueran, mientras otros del grupo vigilaban afuera.
“Cuando me rehusé a obedecer sus órdenes, el Sheikh y otros dos comenzaron a golpearme y a empujarme hacia el piso, luego comenzaron a patearme el estómago”, dijo el Pastor Balidawa. “Otros empezaron a golpear a mí hijo, quien comenzó a gritar por ayuda. Mí hijo y yo sobrevivimos por la Gracia de Dios”.
Golpeado hasta quedar inconsciente, el Pastor despertó junto a su hijo en un hospital de Buluuba, al lado de su cama estaba el Pastor Gerald Kato Wakabi, el líder mayor de 39 años. Balidawa supo que los asaltantes tomaron sus celulares y los destruyeron junto al edificio y las más de 70 sillas del lugar.
El Pastor Balidawa acabo con una pierna rota, y un hueso quebrado en su mano, moretones en su rostro y heridas en sus intestinos y estómago, según el Pastor Wakabi. El hijo de Balidawa sufrió profundos cortes en su frente, un hueso roto en su mano derecha y moretones en el rostro.
Wakabi dijo que el 16 de marzo encontró una nota escrita en el sitio de la iglesia destruida, que decía: “No más iglesias en esta área. Este lugar es tierra santa para adoración de Alá solamente”.
En agosto del 2022, Mukama envío un mensaje amenazante a Wakabi: “Debes quitar la iglesia, no podemos ver a nuestra gente convertirse al Cristianismo y quedarnos callados”.
“Este incidente ha asustado a muchos creyentes”, dijo Wakabi. “Creo que serán restaurados espiritualmente, pero no será fácil”, dijo Wakabi.
La iglesia, que comenzó en enero del 2022 y ahora cuenta con 47 congregantes, incluyendo 12 convertidos del Islam, ha entrado a los hogares ya que el pastor alienta a sus miembros ha mantenerse firmes en la fe. La congregación está buscando otro lugar para reunirse a 30 kilometros de distancia, lejos de la mezquita del pueblo, y una vez establecidos allí se hará la denuncia en la policía, según confirmó el Pastor Wakabi.
La prioridad ahora es guardar la fe de los cristianos y que no la pierdan, especialmente aquellos que han dejado el Islam para abrazar el Cristianismo”, dijo él.
El ataque fue una de las últimas instancias de persecución a Cristianos en Uganda que se han reportado en los medios.
La constitución de Uganda y otras leyes garanticen la libertad religiosa, incluyendo el derecho a propagar la fe personal y convertirse de una religión a otra. Los musulmanes representan apenas el 12% de la población de Uganda, con una gran concentración en el este del país.
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